lunes, 30 de enero de 2017

Juegos para desarrollar el autocontrol

Poder gestionar las emociones y regularlas es parte importante de la vida, ya que nos permite pensar antes de actuar y a su vez, reflexionar para conducirnos de manera consciente. La infancia es el mejor momento para desarrollar esta habilidad, ¿y qué mejor método para ello que el juego? Jugar es la mejor manera de aprender.

Estos juegos te permitirán trabajar el autocontrol con niños:

El Lazarillo 
Objetivo: lograr una confianza suficiente para que se pueda dar la
colaboración.
Materiales: pañuelos o vendas para tapar los ojos.
Desarrollo: la mitad del grupo tiene los ojos vendados. Están agrupados de dos en dos (uno vendado y uno es el guía). Los guías eligen a los vendados sin ser identificados. Durante unos minutos los lazarillos conducen a los niños vendados, después de un rato, se cambian los papeles. Los nuevos guías vuelven a elegir a su lazarillo sin ser vistos. Después se hablará de los sentimientos que cada niño ha tenido.


Aros Musicales 
Objetivo: tener en cuenta los sentimientos de los demás a la hora de actuar. reconocer y responsabilizarse de los propios actos. Establecer normas consensuadas.
Materiales: aros de psicomotricidad (plasticos) y un equipo de música.
Desarrollo: para comenzar a jugar, los participantes se agrupan por parejas, colocándose cada una dentro de un aro de psicomotricidad. Cuando suena la música cada pareja se desplaza por la habitación bailando dentro de su aro, cuando para la música, cada pareja se tiene que juntar con otra y colocarse juntos en el interior de los dos aros (uno encima del otro, funcionan como uno solo). El juego continúa hasta que el mayor número de participantes esté dentro del único aro. Es importante que exista una coordinación de movimientosentre las personas que están dentro de un mismo aro a la hora de moverse, no sólo por la idea de cooperación sino también por el dominio del propio cuerpo.


Las Abejas Trabajadoras 
Objetivo: confiar en uno mismo.
Materiales: objetos varios.
Desarrollo: uno de los niños sale de la habitación mientras los otros eligen un objeto: un cuadro, un reloj etc... Al incorporarse el niño que salió, el grupo imitará el ruido de las abejas: “bzzz, bzzz…”, aumentando la intensidad si se aproxima al objeto seleccionado y disminuyendo si se aleja de él. Cuando lo adivine, se repetirá el juego con otro niño.


El Semáforo 
Objetivo: aprender a controlar los sentimientos y los impulsos.
Materiales: tres globos pequeños por cada niño: uno rojo, otro amarillo y otro verde.
Desarrollo: Sentamos a los niños en círculo y les entregamos a cada uno un globo rojo, otro amarillo y otro verde. Comenzamos una charla sobre sus rabietas: cómo reaccionan cuando se enfadan, por qué y si consiguen algo así. Les decimos que lo mejor que podemos hacer cuando nos enfadamos, en lugar de patalear o llorar, es explicar qué es lo que queremos y por qué. Vamos a ponerles situaciones que puedan provocarles enfado (por ejemplo, que quieran algo y no se lo compren, que quieran jugar con un juguete con el que quiera jugar otro niño…) y preguntamos cómo reaccionan ellos en esos casos. Pedimos a un niño que responda a una situación. El resto de los niños deberá valorar su reacción con los globos en función de si se ha parado a pensar e intenta razonar (globo verde), si dice algo que indique que se empieza a enfadar (debemos complicarle el caso para que reaccione), en este caso, los demás deberán mostrar los globos amarillos, que indican percaución, o si grita y patalea, en este caso, los demás mostrarán los globos rojos indicando “stop”. Y diremos entre todos como se podría reaccionar en estos casos.


Los Contrarios 
Objetivo: conocer, expresar y controlar los sentimientos propios. Tener en cuenta los sentimietnos de los demás a la hora de actuar.
Materiales: dos gorros de papel  confeccionados por ellos mismos.
Desarrollo: un jugador toma los dos sombreros de papel y va a ofrecer uno a un jugador de su elección. A partir de ese momento, el elegido debe efectuar los gestos exactamente contrarios realizados por el primer jugador. Si éste se pone el sombrero, el otro tiene que quitárselo. Si ríe, el otro tiene que llorar. Si el segundo jugador comete un error, es eliminado y entrega su sombrero al conductor, que elegirá a otro jugador. Si no comete ningún error en un periodo corto de tiempo, se convierte en ganador y pasa a ser conductor y toma el otro sombrero para ir a ofrecérselo a otro niño.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Manual para el tratamiento grupal del incesto y el abuso sexual infantil



Descripción de Manual

Este manual, desarrollado por la Doctora Gioconda Batres Méndez, está dirigido a niñas y niños entre los 7 y los 12 años de edad. En este manual se recogen los aportes de diversos autores y autoras norteamericanos y pare de la experiencia que ella ha desarrollado desde 1990 con niños y niñas víctimas de la violencia sexual en Costa Rica.

La edición de este manual ha sido especialmente concebida para un grupo de profesionales que se entrenan en Costa Rica, dentro del marco de ejecución del Programa Regional de Capacitación contra la Violencia Doméstica del ILANUD, sobre el manejo terapéutico de las personas abusadas sexualmente.

La autora refiere que la validación de este modelo, dependerá en gran medida de la experiencia que los profesionales desarrollen y de sus aportes prácticos y teóricos. Por tal razón considera este manual como un documento inicial, sujeto a modificaciones, las cuales reflejan nuestra experiencia latinoamericana.

Además, ha procurado escribirlo en un lenguaje sencillo, comprensible y dulce, con la finalidad de que se pueda leer sin mayor dificultad. Quienes utilicen este manual, deben apoyarse con la teoría, vertida en el libro: “Del ultraje a la Esperanza. Tratamiento para las Secuelas del Incesto”, o bien de su autoría, o con alguna bibliografía que sea afín a este tema. Además deben poseer entrenamiento en la perspectiva de género y en la teoría sobe el incesto y el abuso sexual infantil, desde esa perspectiva.

El objetivo primordial de este manual es seguir contribuyendo con la desaparición de la violencia sexual hacia los niños y niñas de América; crímenes de poder que aún cuentan con la complicidad social. Además de apoyar a los terapeutas que tengan en sus manos la valiosa vida de las niñas y niños que han sufrido esta violencia.

Estructura del Manual 

A continuación se presenta una breve introducción sobre los temas que aborda cada una de las sesiones.


1. Presentación, establecimiento de las reglas y de la alianza terapéutica
La sesión debe efectuarse en un ambiente de calidez y seguridad; la pareja de terapeutas debe expresarse en forma clara, comprensible, respetuosa, según la edad o nivel educativo, desarrollo o capacidad cognitiva. En la pareja de terapeutas se recomienda que sea un hombre y una mujer. El grupo puede ser conducido, si no hay recursos, por una sola terapeuta o por un terapeuta masculino.

2. Confianza y Apoyo:
Generalmente los niños y niñas que han sido víctimas de algún tipo de abuso sexual se mantienen aislados del resto de personas, puesto que se sienten marcados por la traición que se le s ha infligido, porque el secreto impuesto les hace sentir indignas o indignos ya que el abuso sexual desmorona la capacidad de establecer confianza y vínculo. Por tal razón una de las primeras cosas que debe proponerse la pareja de terapeutas es brindar un ambiente dentro del grupo que promueva la confianza.

3. ¿Como me Siento?
Para sobrevivir el abuso, los pequeños víctimas, tuvieron que separar los sentimientos de los hechos y de recuerdos. Reintegrar recuerdo y sentimiento es una de las grandes tareas de este modelo terapéutico.

4. Mitos y Realidades. El desarrollo del NO
El abuso destroza y aniquila a los niños y niñas, dado que por su corta edad no han logrado fortalecerse lo suficiente y están desarrollando sus defensas básicas. La reconceptualización cognitiva será de utilidad en esta sesión, en la que se reflexionara sobre los mitos. Las familias donde se da el abuso son muy estereotipadas y el abuso mismo deja a la niña o niño llenos de culpas y distorsiones.

5. La Revelación
Se espera en ese momento del proceso, haber fortalecido lo suficiente en la o el niño, sus destrezas, la capacidad de búsqueda de apoyo y sus habilidades. Ya se les ha brindado la información correcta sobre el abuso. Sobre el abuso sexual ha habido un silencio histórico impuesto a las víctimas, que permanecen calladas por años, incluyo algunas no hablan nunca. Por tal razón, aunque habar sobre el abuso sexual sea vergonzoso y doloroso, es un derecho, que además de necesario y terapéutico, les otorgará la sensación de que son creídos o creídas y comprendidos por primera vez.

6. Prevención de Abusos Futuros
Por razones de socialización muchos niños, a quienes se les enseña a no ser víctimas, tienden a repetir el abuso sexual a otros niños o niñas. Pero también algunas niñas lo hacen, dado que el amor y el contacto se sexualizaron.  (G. Batres, 1999).
Una sesión en donde se ayude a estos pequeños a comprender que no es bueno repetir el abuso o maltratar físicamente a otros, toca un tema imprescindible y muchas veces ignorado en el tratamiento de niños abusados sexualmente.

7. Valorando el Genero
El abuso sexual es un abuso de poder. En el proceso de socialización plagado de desigualdades entre los sexos, se legitima la injusticia y el abuso hacia los más débiles. Prepara a los niños para que conozcan sus derechos y se valoren como personas, contribuye a que se produzca una ruptura en los valores que permiten y promueven estas desigualdades de poder y la desvalorización.

8. El Enojo
Cuando se es traicionado por alguien a quien se quiere, se despierta un gran sentimiento de enojo. Cuando el ofensor es el padre, madre o hermano o una persona muy cercana, el enojo va acompañado de otros sentimientos, esto se denomina ambivalencia.
A los niños en especial, se les dificulta expresar lo que sienten, por razones de su socialización. Por tal razón lo hacen por medio de la violencia hacia los demás. Se debe validar sus sentimientos de enojo y hacerles ver que está bien, pero que debe dirigirse a quienes le han dañado.

9. El Poder
El abuso sexual invade el territorio físico y psicológico de la víctima en contra de su voluntad. Cuando los niños creen que las personas adultas tienen la razón, los mensajes destructivos y crueles de quienes los abusaron han tenido un gran impacto en sus vidas, transmitiéndoles el mensaje de ser personas sin valor ni importancia.
La víctima es invalidada y aprende que ella no será escuchada, a la vez que se le desarrolla un sentimiento de ineficacia. Aprender a reconocer estos mensajes y sustituirlos por mensajes positivos es parte valiosa del proceso de sanación (G. Batres, 1998)

10 y 11. Su Cuerpo
Los niños abusados sexualmente, con frecuencia creen que su cuerpo ha sido dañado físicamente de alguna manera, o que el abuso sexual ensucia y malogra su cuerpo. No tienen información clara y sin prejuicios sobre el cuerpo y los órganos genitales. Como el cuerpo fue el vehículo del abuso sexual, lo odian o sexualizan las relaciones.

12. Autoestima:
La autoestima es la percepción sobre uno mismo, la idea sobre nuestro valor y habilidades. Los niños abusados sexualmente, vivieron en circunstancias que les llevaron a sentirse malas personas. El abuso sexual imprime un concepto de estigma y poco valor. Hay vergüenza y culpa asociados al crecimiento (G. Batres, 1998).

13. El Futuro
Se ha concluido un proceso en donde la mayoría salen victoriosos. Habrá algunos que necesiten proseguir por algún tiempo en terapia individual. En este momento se habla sobre la posibilidad siempre abierta de regresar por ayuda, principalmente porque separarse de personas junto a las cuales se han edificado las bases de una nueva vida, es una pérdida que genera un entendible, pero inevitable dolor.
El seguimiento grupal que recomienda Gioconda Batres consta de dos sesiones cada tres meses (G. Batres, 1998).

14. Graduación
Este día debe ser muy especial, todo debe ser positivo y alegre: deben haber planeado entre todos cómo pasarla de lo mejor.
Un recuento de parte de la pareja de terapeutas sobre todas las cosas logradas por parte de cada uno es importante. Además, hablarles de cómo se enfrentarán al mundo como seres más valientes y fuertes para salir adelante.



Manual para el tratamiento grupal del incesto y el abuso sexual infantil, Gioconda Batres









martes, 10 de noviembre de 2015

Metáfora


La metáfora o analogía se puede definir como una historia real o ficticia cuya finalidad es informar, educar, curar y estimular al crecimiento interno. Se busca atraer la atención consciente del individuo y burlar sus mecanismos de defensa a fin de permitirle entrar en contacto con las fuerzas del inconsciente.

La alegoría es un proceso mediante el cual las personas hacen un descubrimiento desde su interior: acceden a un nuevo conocimiento que surge del inconsciente individual y va hacia la mente consciente. En el relato metafórico el paciente percibirá unas veces de forma consciente pero la mayoría de ellas de forma inconsciente algo que le esta afectando, algo que le concierne o que tiene que ver directamente con un aspecto particular de su vida. 

Utilizando esta herramienta la persona encontrara sus propias soluciones, una vez que el relato le haga contacto ciertas cosas sobre su problemática y los conflictos internos que se están viviendo en ese momento.


¿Cómo funciona? 

Esta destinada a establecer conexiones, en una primera fase la metáfora terapéutica permitirá según el enfoque ericksoniano, quitar importancia al cerebro izquierdo, es decir, a la mente consciente, para ingresar al cerebro derecho, a la parte inconsciente, el lado intuitivo, espontáneo, creativo, etc.

En la segunda fase, el cerebro izquierdo es quien logra sintetizar el trabajo ya realizado para buscar una solución interna. La alegoría comienza penetrando en el mundo interno del oyente quien trata de encontrar en ella similitudes coherentes. Si la historia toma de pronto una dirección imprevista, el oyente se ve entonces forzado a establecer coherencia de su modelo del mundo comprometido con el relato y en ese preciso momento, se modifica su mundo de creencias y de ideas definidas.

Las alegorías permiten recoger el pasado, situarnos en el presente y proyectar la esperanza hacia el futuro.


Ventajas

  • No son amenazadoras
  • Son seductoras
  • Estimulan la independencia, pues el individuo debe captar sus conclusiones o realizar las acciones correspondientes.
  • Pueden ser utilizadas para vencer la natural resistencia al cambio.



lunes, 9 de noviembre de 2015

Uso de imágenes surrealistas en Psicoterapia

¿Qué es el surrealismo? 


Es un movimiento artístico y literario que comenzó en Francia. En 1928, Breton expone la psicología en el surrealismo en la cual el inconsciente es la región del intelecto donde el ser humano no objetiva la realidad sino que forma un todo con ella,  el sueño, es la manera en la que el inconsciente se expresa libremente y el surrealismo traslada esas imágenes de los sueños al mundo del arte por medio de una asociación mental libre, sin que la conciencia se entrometa. 


Uso en Psicoterapia


Para realizar psicoterapia con niños utilizando imágenes surrealistas se pueden utilizar imágenes de revistas, láminas, fotos surrealistas, etc. mejor si están por separado para que el niño escoja la que quiera utilizar.  
Al tener las imágenes el niño escoge una de ellas o se le da una especifica y él debe inventar una historia con la misma.






Títeres en psicoterapia infantil



El uso de títeres es llamativo para la mayoría de niños, para ellos el títere es un personaje mágico que los conduce a la imaginación y la creatividad. Además de sus beneficios lúdicos, son una rica fuente de juego simbólico y un útil auxiliar terapéutico.

Estos son algunos de los casos en que pueden ser utilizados:

En el caso de niños tímidos, los ayuda a expresarse con mayor facilidad y a  trabajar en equipo, etc. Los niños tímidos son capaces de hablar con más fluidez “detrás” del títere, dicen y hacen cosas que el niño puede encontrar demasiado difíciles de expresar de manera abierta.

En niños con problemas de atención, también es útil, podemos ver que niños que difícilmente prestan atención en clase, pueden aprender a concentrarse en las obras.

En niños con problemas de lenguaje, mejoran la dicción, se puede observar mejorías en niños con problemas de tartamudeo al hablar a través del títere. 

Tipos de títeres

Las colecciones de títeres varían, dado que los problemas de los niños en general se centran alrededor de las situaciones en casa, es importante contar con una multitud de personajes. Existe una gran variedad, entre ellos están: Títeres de guante, títeres digitales, títeres planos, títere de papel, títeres guiñol, títeres de varilla, etc. 

El terapeuta debe tomar nota del dialogo, personaje y conflicto, se puede ampliar el formato de la representación entrevistando a los títeres, al titiritero para que ayuden a desenmarañar los diversos significados de la historia.


Beneficios de la utilización de los títeres en los niños
Se promueve la autoconfianza en sus habilidadesA través de las representaciones exterioriza su yo, sin inhibiciones.
Toma conciencia de su creatividad.
Mejora la vocalización y la expresión oral.
Mejora el autoestima y vence la timidez.
Desarrolla el área psicomotora fina.
Recomendaciones para los padres y especialistas

Los títeres como recurso terapéutico 

Deben ser utilizados por profesionales, especialistas en terapia infantil, por otro lado, como en toda intervención terapéutica, es un recurso útil, más no la solución a los conflictos, el uso adecuado y la dirección y guía del terapeuta es lo esencial para la efectividad del tratamiento.

Los títeres pueden ser utilizados por los profesores para desarrollar los objetivos curriculares en el área de comunicación integral y personal – social, es un excelente medio para desarrollar el lenguaje y para modelar conductas adecuadas frente a diversas situaciones; así el niño observa la obra, la disfruta, participa, se comunica y a la vez que interioriza valores, normas de convivencia social, desarrolla su lenguaje, su creatividad y mejora su autoestima.

Dado los beneficios que posee el uso de títeres, en el área educativa y socio-emocional, es oportuno que los padres jueguen con sus hijos, aprenden a conocer sus emociones, sentimientos y temores, si esto se promueve, tendríamos niños más comunicativos y creativos.

martes, 13 de octubre de 2015

Juego Proyectivo



Este método proyectivo, esta basado en la Terapia Gestalt, generalmente es usado con niños, pero en  ocasiones resulta útil con adolescentes y adultos. Este juego proyectivo es semi-directivo, se basa en que al niño o niña se le muestran todas las figuras de fieltro y debe construir con ellas una historia e irla narrando al terapeuta. Para llevar a cabo este proceso se deben utilizar los 14 pasos para hacer psicoterapia.


El juego proyectivo es un complemento para las técnicas narrativas en la terapia Gestalt. Ésta contiene: una tabla de 45 cm x 30 cm forrada en fieltro, se sugiere que una mitad sea de color azul (para el área del cielo), y la otra mitad de color verde (para el área de la tierra). Además, es importante crear múltiples siluetas de fieltro para que el niño pueda manipularlas sobre la tabla mencionada mientras habla o narra una historia de lo que sucede en su creación.




Este es un listado de las figuras sugeridas, con algo de creatividad se puede ampliar la gama de opciones.





lunes, 12 de octubre de 2015

14 Pasos Terapia Gestalt



1. Hacer que el niño comparta la experiencia de dibujar —sus sentimientos acerca de enfrentar y hacer la tarea, cómo enfrentó y continuó el trabajo, su proceso. Esto es compartir aún más el yo.

2. Hacer que el niño comente el dibujo mismo, describiéndolo a su manera. Esto es compartir aún más el yo.

3. A un nivel más profundo, estimular en el niño un mayor autodescubrimiento pidiéndole que se explaye sobre fragmentos del cuadro; esclareciendo los fragmentos, haciéndolos más obvios; describiendo las figuras, formas, 
                                                  Colores, representaciones, objetos, personas.

4. Pedir al niño que describa el cuadro como si éste fuera él, usando la palabra 
"Yo": "Yo soy este cuadro; yo tengo líneas rojas por todos lados y un cuadrado azul al medio".

5. Escoger cosas específicas en el cuadro para que el niño se identifique con ellas: "Sé el cuadrado azul y descríbete con más detalles —qué aspecto tienes, cuál es tu función, etc.".

6. Hacer preguntas al niño, si es necesario, para ayudarle en el proceso: "¿Qué es lo que haces?". "¿Quién te usa?". "¿A quién quieres más?". Estas preguntas surgirán de su capacidad de "meterse" en el dibujo junto con el niño y abrirse a las múltiples posibilidades de existir, funcionar y relacionar.



7. Concentrar aún más la atención del niño y agudizar su toma de conciencia mediante el énfasis y la exageración de una o más partes de un cuadro. Estimular al niño para que llegue tan lejos como pueda con un fragmento específico, especialmente si hay energía y entusiasmo en usted o en el niño, o si hay alguna excepcional falta de energía y entusiasmo. Las preguntas a menudo ayudan. "¿A dónde va ella?". "¿Qué está pensando este círculo?". "¿Qué va a hacer?". "¿Qué le va a ocurrir?". Y así sucesivamente. Si el niño dice: "No lo sé", no desista; trasládese a otra parte del cuadro, haga otra pregunta, dé su propia respuesta y pregunte al niño si está correcta o no.

8. Hacer que el niño entable un diálogo entre dos partes de su cuadro o entre dos puntos de contacto u opuestos (tales como el ca- mino y el auto, o la línea alrededor del cuadrado, o el lado feliz y el lado triste).


9. Estimular al niño para que ponga atención a los colores. Al dar sugerencias para un dibujo mientras el niño está con los ojos cerrados, yo a menudo digo: "Piensa en los colores que vas a usar. ¿Qué significan para ti los colores brillantes? ¿Qué significado das a los colores oscuros? ¿Vas a usar colores brillantes u opacos, colores claros u oscuros?".  

10. Estar atento a claves en el tono de voz, postura del cuerpo, expresión facial y corporal, respiración y silencio del niño. El silencio puede significar censura, pensamiento, remembranza, represión, angustia, miedo o conciencia de algo. Use estas claves para promover la fluidez en su trabajo. 

11. Trabajar la identificación, ayudando al niño a "reconocer" lo que se ha dicho sobre el cuadro o partes de éste. Puedo preguntar: "¿Siempre te sientes así?". "¿Alguna vez haces esto?". "¿Encaja eso en alguna forma con tu vida?". "¿Hay algo de lo que dijiste como rosal que podrías decir de ti como persona?", etc. Interrogantes como éstas se pueden refrasear de muchos modos. Siempre las hago con tino y suavidad.  Los niños no siempre tienen que "reconocer" las cosas. A veces se retraen y temen hacerlo. A veces no están preparados. A veces parece suficiente que hayan exteriorizado algo mediante al cuadro aunque ellos mismos no lo reconozcan. Pueden darse cuenta de que yo he oído lo que tenían que decir. Han expresado a su manera lo que necesitaban o querían en ese momento.


12. Dejar el dibujo y trabajar en las situaciones de vida del niño y los asuntos incompletos que emergen del cuadro. En ocasiones esto se precipita directamente de la pregunta: "¿Encaja esto con tu vida?", y a veces el niño lo asociará espontáneamente con algún hecho de su existencia. En oportunidades el niño repentinamente se pondrá muy silencioso o alguna expresión cruzará su rostro. Puedo decirle: "¿Qué acaba de pasar?", y el niño generalmente empezará a hablar sobre algo en su vida ahora o en el pasado que de alguna manera se relaciona con su actual situación de vida. (Y a veces responde: "Nada").

13. Estar atento a las partes faltantes o espacios vacíos en los cuadros y prestarles atención.

14. Permanecer en el flujo de primer plano del niño o prestar atención a mi propio frente —donde encuentro interés, entusiasmo y energía. A veces voy con lo que está allí, y otras, me adhiero a lo opuesto de lo que hay allí. 




Ventanas a nuestros niños
Violet Oaklander